Moja la esponja con pintura y escurre el exceso. Si es una esponja sintética quita pedacitos de la superficie antes de mojarla. Asegúrate de que no queden gotas de exceso de pinturas en ningún lado.
Aplica separadamente haciendo presión moderada. Rellena todos los espacios vacíos, agrégale más pintura si es necesario. Asegúrate de que todo el patrón sea similar.
Presiona ligeramente la esponja en la superficie deseada y levanta. Repetir el procedimiento en toda la superficie dándole diferentes ángulos.
UTILIZANDO DOS COLORES Si se van a utilizar dos colores, sigue los pasos anteriores. Aplica el primer color y cuando la pintura esté completamente seca, aplica el segundo color. Asegúrate de que todo el patrón sea similar.